¿Cuál de los dos es el ideal para ti? En este articulo te mostraremos 2 clases de tendidos y sus ventajas o desventajas a la hora de usarlos.
Tendido de cama tipo duvet
Un Duvet se compone de dos partes: la primera, que es el duvet, o la funda que recubre, y la segunda, el plumón, que es el relleno que lo hace acolchado por dentro.
La ventaja que más te va a gustar es su ligereza, si lo usas sin plumón en su interior será delgado como un cubrelecho.
Es muy versátil a la hora de vestir tu cama. Los duvets son más dinámicos, esto quiere decir que tendrás estilos diferentes para adornar tu cama sin ocupar tanto espacio, porque solo tendrás que adquirir el plumón una sola vez ya que siempre usarás el mismo.
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Tendido de cama tipo cubrelecho
El cubrelecho es de una sola pieza, la combinación del relleno y el forro, y es por eso que es acolchado.
Es excelente para darnos abrigo. En las noches es muy cómodo, y a la hora del tendido de cama, pues al solo ser de una pieza, te ahorrará tiempo. Los cubrelechos más calientes son los cubrelechos ovejeros.
Cuidados al momento de lavar el edredón o el duvet.
Como sabemos el Duvet es una funda, que por dentro se encuentra su cierre y el plumón acolchado que trae en su interior. Como tiene el relleno separado, es más fácil de lavar, y al momento de secarse toma menos tiempo.
¿Cuál es mejor comprar?
Reuniendo las ventajas y desventajas de todos los tipos de tendidos de cama, indiscutiblemente los duvets son los más cómodos en precio por ser solo las fundas. Su lavado y secado son los más rápidos, y además, nos permite ambientar nuestra habitación con las últimas tendencias rápidamente.
Ten en cuenta que es muy importante para ti, invertir en un buen tendido para cama, y que te ayude a tener un sueño más largo y profundo, debido a que es muy importante la salud de nuestro sueño. Que sea un tendido que te abrigue en las noches frías, ofreciéndote calor.
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